¿RECUPERACIÓN ECONÓMICA O BURBUJA ECONÓMICA?

 Artículo #2    

´´Cuanto más planifica el Estado, más complicada se le hace al individuo su propia planificación´´

Friedrich August Von Hayek

 

Es fácil evidenciar que la propuesta económica estrella de todos los candidatos a la presidencia boliviana en el 2020, es la famosa ´´reactivación económica´´, la cual se plantea con bombos y platillos, en favor del empresariado y la población en general, aunque se intenta ocultar con perspicacia, se escuchó varias veces que el método propuesto de financiamiento para concretar esta propuesta, es la del endeudamiento.

Este endeudamiento se lo plantea como, una deuda sostenible, pero al fin y al cabo el problema de toda deuda es que debe ser pagada, la diferencia de una deuda privada y una deuda pública radica básicamente en que el que se presta no será el que pague, puesto que los políticos se prestan a nuestro nombre sin nuestro consentimiento, la deuda recaerá con el tiempo es nuestros bolsillos dado que debe ser saldada con los impuestos que día a día paga el que produce.

El contar con dinero inyectado a la economía, en el corto plazo creará una mejora, claro, este dinero disponible dinamizará la economía, pero el diablo esta en los detalles, este dinero no necesariamente va a parar a los sectores productivos que lo necesitan, pues es otorgado arbitrariamente por el poder político, el cual pocas veces decide por términos de eficiencia ya que las consecuencias no son pagadas por los políticos sino por la población en general.

En el mediano y corto plazo se verán las repercusiones de esta medida, sectores que fueron beneficiados con este apoyo pero que no fueron sustentables, harán desaparecer parte del dinero prestado, tal como sucede con cualquier inversión mal hecha, en el largo plazo la carga de la deuda tendera a sentirse, ya que el estado deberá desviar recursos al pago de esta, recursos que podrían ser utilizados en necesidades futuras más importantes.

Esto muy probablemente acabara siendo un falso crecimiento, después de la borrachera y el despilfarro, llega la resaca y las billeteras vacías.

Sin duda una mejor alternativa es la disminución del gasto público para de esta manera permitirse una disminución de los impuestos, para estimular la inversión, la cual logrará un verdadero crecimiento sostenible y trabajos en favor de la población boliviana. 

Por: Esteban Eduardo Burgoa Cardozo